Una mujer y su esposo están a punto de meterse en la cama. El esposo, de pie frente al espejo, se echa una mirada y comenta:
-¿Sabes, querida?, me miro en el espejo y me veo tan viejo... Tengo arrugas en la cara, los pectorales no son ya chocolatinas sino una montaña rusa, el culo lo tengo caído un metro, tengo barriguita cervecera, tengo las piernas gordas y los brazos flojísimos...
Se da la vuelta, y mirando a su esposa, continúa:
-Anda, sé buena y dime algo positivo, algo que me haga sentir mejor...
La mujer lo observa detenidamente, piensa un momento, y le contesta
sonriendo:
-Bueno, mi amor, no te preocupes: al menos la vista la tienes de puta madre.
6 comentarios:
jajajja qué mala!!. Una respuesta pelín cariñosa no hubiera estado mal..
Cu, preciosa, ¿ves cómo tengo la vista?.
¡Qué no estás guapa ní ná en la foto!. ¡Y qué boca!.
Turulatopreciosísimo, te voy a terminar contestando una burrada..., te imaginas!?
Vale. Pero yo creo que lo que habla el esposo es más bien lo que piensa una mujer de sí misma cuando va cumpliendo muchos años.
Yo creo que lo hombres no piensan así, ni siquiera los más mayores. Somos digamos... más simples.
Uy en mi caso la vista la tengo hasta mal, toy como un topo. Hola mis wapas mujeres e vuelto
Cómo me gusta la gente sincera! :)
Besos a todas y a todos :)
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