09 octubre 2007

016

El teléfono 016, que atiende llamadas de mujeres víctimas de malos tratos se ha colapsado solo unos días después de su presentación. Aquí tenéis un enlace por si queréis saber más de la noticia. Y es algo que me entristece y me enoja al mismo tiempo. No el hecho de que centenares o miles de mujeres llamen pidiendo ayuda, sino pensar, saber, que esas mismas mujeres están viviendo una pesadilla en su propia casa a diario. Poder imaginar lo que están pasando.
No pretendo escribir sobre el tema de los malos tratos, creo que me viene demasiado grande y además temo ser demasiado visceral, solo pretendo hacer reflexionar, escuchar lo que tenéis que decir, lo que opináis, lo que sentís, solo pretendo que por un momento seamos capaces de ponernos en la piel de estas mujeres e intentemos ver con con sus ojos, pretendo que seamos más comprensivos, que intentemos entender que para ellas no es tan fácil deshacerse de su yugo como para nosotros decir "pues denuncia", pretendo que las arropemos, las ayudemos, las protejamos... pero de verdad. Pretendo que no se banalice un tema tan desgraciado y serio como es este.

3 comentarios:

Vitore dijo...

Es verdad que a veces tendemos a ser demasiado simples porque normalmente ninguna de las mujeres que conocemos pasa por un trance tan terrible como el de los malos tratos y como apuntas (Cobre) simplemente decímos: "pues denuncia". Lo malo es el después, el que una vez que ha tomado la valiente decisión de denunciar, la mujer se siente desamparada con el solo escudo del papel de la comisaría en el que consta esa denuncia. Hay que denunciar, sí, pero no dejemos a las mujeres presas de la ira del denunciado, sino protegidas al 100% y castigado al 100% el bastardo maltratador.

Rosenrod dijo...

Totalmente de acuerdo: es muy fácil resumirlo todo en "pues denuncia", es muy fácil criticarlas cuando retiran las denuncias... pero cuando te encuentras bien sola, arrinconada, amenazada, ¿es de echarles en cara que les venza el miedo? Ojalá no tuvieran que sentirse así, y creo que la única manera es con los casos que podamos conocer o tengamos cerca. Sólo así podrá crearse una verdadera malla útil de solidaridad, y desde ahí exigirle al Estado que cumpla su parte.

Un beso!

Mar dijo...

es terrible pensar en esas mujeres que ni siquiera pueden coger un teléfono para pedir auxilio. Y tantas como ni aún anónimamente pueden llamar.
Terrible