Como sé que venís, he pensado recibiros con una sonrisa.
Os traigo las fotos más fashion que he encontrado de mis vacaciones.
Tienen una pequeña historia:
El "novio" de mi hija tuvo la amabilidad de hacernos una visita, como dicen en mi tierra, "estábamos pocos y parió la abuela". Le dejamos nuestra habitación, y nos acomodamos en el sofá cama del salón.
Notábamos que muy seguros no es que estuviéramos, así que ni respirabamos, pero ni por esas, de golpe y porrazo se cerró una de las partes de la cama.
Al oir el gran estruendo todos al salón y claro, mis hijos se daban tortas por hacernos la foto.
Ya os imagináis que entre la risa, y esa movilidad que ya me caracteriza no podian sacarme de la cama.
En la siguiente foto le había dicho a mi hermana "me voy a torrar", así que me tumbo en la silla..... y ¡zas!, así quedé, con la clase que me caracteriza.
Bienvenid@s a ésta que es vuestra casa.