18 septiembre 2006

Y no mintió

Una señora estaba en un avión volviendo de Suiza. A su lado estaba sentado un cura, entonces ella le pregunta:

-Padre puedo pedirle un favor?

-Si hija mía que quieres?

- Mire, compré un depilador eléctrico súper sofisticado, muy caro, el cual aun no he usado y tengo miedo que supere mi límite de introducción en la Aduana. Podría usted esconderlo debajo de su sotana? -Sí mi querida puedo, solamente debo advertirte que yo no sé mentir.

La señora piensa:

-Ay!!!.... ojalá que nadie le pregunte nada al cura.

Luego le dice: -Está bien padre, gracias por su ayuda. Y le da el depilador.

Llegando a destino en el aeropuerto, el agente de Aduana le pregunta al cura:

-¿Algo por declarar padre?

A lo que el cura responde: -De la cabeza a la cintura, nada a declarar hijo mío.

Medio extrañado el agente pregunta

-¿Y de la cintura para abajo, qué tiene?

-Allá abajo tengo un instrumento para mujeres que nunca ha sido usado.

Y el agente echa una carcajada y dice:

-Próximo de la fila!!!

2 comentarios:

Turulato dijo...

(Carcajada)

pilar dijo...

jajajajajaja
...estos curas cotillas, que to lo sueltan....